A lo largo de la historia, las flores han estado presentes en los momentos más emotivos como símbolo de amor, alegría o agradecimiento. Su belleza, su elegancia, sus colores y formas evocan sentimientos y emociones que las convierten en el mejor de los regalos.
Lo mismo ocurre con el chocolate, el icono del placer por excelencia, que seduce a todo tipo de paladares y protagoniza infinidad de momentos únicos. Su sabor, su textura, su aroma… hacen del chocolate Pancracio un detalle inolvidable.
The Garden es un homenaje al acto de regalar, la simbiosis perfecta entre las flores y el chocolate. Dos símbolos atemporales que dicen mucho sin necesidad de palabras; dos maneras distintas pero idénticas de demostrar a nuestros seres querido lo mucho que nos importan